Hace 14 años exactos, en su primer año como profesional, Santiago se coronaba en Bogotá.

Santiago Giraldo es uno de los tres tenistas colombianos con más títulos en torneos del Circuito Challenger. Actualmente registra diez consagraciones y se ubica segundo entre los representantes nacionales con más títulos de estas características, junto a Mauricio Hadad, y superados únicamente por Alejandro Falla (11). Justamente, este jueves 23 de julio de 2020 se cumplen catorce años del primer festejo del nacido en Pereira en competencias de estas características.

La confianza lo invadía en aquella edición del Seguros Bolivar Open de Bogotá -realizado en el Club Campestre El Rancho-, puesto que venía de protagonizar su mejor actuación en un torneo de estas características: semifinales en el Challenger de Cuenca (Ecuador), donde fue eliminado por su compatriota Carlos Salamanca.

Ese torneo lo recuerdo con mucho cariño, fue mi primer título challenger. Tenía tan solo 18 años, era mi primera temporada como profesional, por aquel entonces tenía el cabello largo, venía jugando muy bien y llegué con mucha confianza”, recordó.“Una de las grandes anécdotas que tengo fue el partido ante Pablo González en semifinales, porque jugaba muy bien en altura, además de ser un experimentado de la época, perdí el primer set, luego hubo un receso y tras la reanudación lo saqué adelante”, añadió.

“Ese título tuvo el mismo valor de otros logros, como, por ejemplo: mi primer título a nivel nacional, mi primer título suramericano, mi primer título en Europa, mi primer título en un torneo futuro. Era la confirmación de un proceso que venía adelantando, pues cada vez era evidente el progreso, la ratificación que podía seguir adelante; además fue el plus para aumentar mi nivel de exigencia” complementó Santiago, quien a partir de ese momento solo jugó challengers, hasta llegar a los certámenes del Circuito ATP.

El camino al título

Santiago partió como el quinto preclasificado y el sorteo lo ubicó en la parte baja del cuadro. Su primer oponente fue el argentino Diego Veronelli, quien decidió a abandonar el partido cuando caía 0-5; luego se midió al uruguayo Marcel Felder, superándolo por 6-4 y 6-3; en cuartos de final anunció que estaba para grandes cosas, al vencer 6-3, 2-6 y 7-5 al sueco Jacob Adaktusson, segundo preclasificado; en semifinales derrotó a Pablo González por 2-6, 6-3 y 6-4.

El último escollo para acceder al título era el mexicano Bruno Echagaray, una de las grandes revelaciones del certamen, pues se abrió pasó a la final desde el cuadro clasificatorio; además de vencer al antillano Jean-Julien Rojer, tercer sembrado y el brasileño André Sa, máximo candidato al título, en cuartos de final y semifinales, respectivamente. El duelo fue digno de una final, pues Giraldo necesitó de tres sets para dar cuenta de un aguerrido tenista ‘manito’ y con un 6-3, 1-6 y 6-2 abrió su palmarés en el Circuito Challenger.

Ese resultado le permitió escalar hasta el puesto 201 de la clasificación mundial, a finales de ese año incursionó en el Top-200 del ranking ATP, donde estuvo por espacio de casi catorce años.

Redacción Oficina de Prensa

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