Tan bella es Estambul que no sé cómo comenzar a hablarte de ella. Bien, comencemos por ubicarnos un poco. Turquía aunque mantiene buenas relaciones con la Unión Europea, aún no pertenece al bloque económico del grupo internacional. Esto supone muchas características que la distinguen de otros países de Europa, una de ellas es que aquí la Lira es la moneda oficial.
Quizás revelo un poco al político que vive dentro de mí, cuando no es tenista. Me emocionan los temas de gobierno exterior y las políticas particulares de cada país que visito.
Estambul es una ciudad tan elegante como antigua, no pude evitar ser atraído por sus edificios, mezquitas, calles y su vida habitual. Esa sensación de estar en medio del mundo, con palabras nuevas e idiomas que no conoces, es increíble, me maravilla vivir esos momentos.
Los días son un poco fríos aquí. Durante una tarde, Pipe y yo salimos a conocer el Templo de Santa Sofía. Actualmente es el museo de la ciudad. Esta maravilla, a lo largo de los años, ha sido usado como basílica y como mezquita.
Los detalles que se representan en los antiguos edificios del centro de la ciudad me parecen increíbles, totalmente artesanales y con un diseño muy esmerado. Eran grandes los constructores que hicieron Estambul.
Fue increíble para mí poder ser parte de la primera edición del Abierto de Estambul, espero con emoción regresar el próximo año.
Por ahora acabé mi viaje en la gran Turquía. El siguiente objetivo está en Madrid y el torneo Másters. Vamos allá con toda la actitud.
SG