Son los partidos grandes los que te muestran qué tan lejos has llegado; un camino con muchos retos donde has tenido que luchar siempre contra corriente y que gracias a la disciplina, a la constancia y a la motivación de jamás darte por vencido, has podido continuar en la batalla.
La Copa Davis es un gran torneo; cada seleccionado da lo mejor en cada uno de los encuentros contra sus rivales. Es competitivo al 100 por ciento. Con entusiasmo y con la mirada en el objetivo, Robert, Sebas, Alejo y yo, nos preparamos para sacar adelante la ronda frente a Uruguay.
Nos alojamos en la zona de Carrasco, en la bella ciudad de Montevideo. Nuestro hotel estaba a una calle de la Rambla, las habitaciones tenían una hermosa vista hacia el Rio de la Plata y su rivera que se extiende sobre Buenos Aires y La Plata, hasta llegar a confundirse con el Atlántico.
Con un gran esfuerzo en equipo, logramos calificar a nuestro país en la ronda de Play Offs para el Grupo Mundial. Es un gran orgullo representar a nuestro país y más a lado de grandes jugadores que, partido tras partido, sacaron el resultado en cada categoría. Ahora esperaremos y seguiremos preparándonos durante los siguientes meses para buscar la calificación en el máximo circuito.
En breve, viajé a California para jugar el Indian Wells y continuar con el calendario de la temporada. Durante la preparación tuve el gusto de tener un partido de entrenamiento contra Kei Nishikori; fue en verdad emocionante.
En los entrenamientos, la disciplina es la fundamental para los tenistas. Para mi, esa palabra se traduce en tener la capacidad de cumplir con rituales, con exigencias, deberes y rutinas que se necesitan para alcanzar un objetivo. En en pocas palabras, “tener las neuronas en los oídos”.
Acabamos un torneo más. Me siento muy agradecido con cada uno de aquellos que me pudieron ver durante los partidos del Indian Wells. Nuestro próximo torneo espera en Miami; es otro de los torneos Masters más importantes de la temporada y buscaremos llegar ahí con toda para lograr avanzar a paso firme.
¡Vamos Colombia!
